Hoska

Las zapatillas unisex barefoot HOSKA están inspiradas en las canchas de tenis. Están hechas para quienes aman las zapatillas clásicas con cordones y buscan comodidad en cada paso. Son tan cómodos, con una generosa cantidad de espacio para los dedos, que puedes caminar con ellos fácilmente durante horas. La combinación perfecta entre diseño y comodidad. La parte superior de lona de cáñamo natural es transpirable, duradera y absorbe la humedad. Suela de caucho natural de 4 mm de grosor y ultraflexible para disfrutar de cada paso. Calzado sostenible fabricado en la UE. Certificación vegana aprobada por PETA (Personas por el Trato Ético de los Animales). 

La lona de cáñamo es un textil natural, sostenible y ecológico. Es antibacteriano, absorbe naturalmente la humedad y es resistente a los olores. Al ser el tejido natural más resistente, garantiza durabilidad y longevidad. El cáñamo ahorra agua: utiliza sólo 1/20 de la cantidad de agua que el algodón estándar para crecer y procesarlo.

Estas elegantes zapatillas con cordones reúnen todas las características del calzado minimalista: son totalmente flexibles y ligeras, tienen una suela fina y flexible sin elevación del talón y tienen mucho espacio para los dedos de los pies.

Suela de caucho natural flexible y fina de 4 mm.

Plantilla extraíble de 4 mm de grosor hecha de espuma de látex para comodidad durante todo el día.

Manufacturado en fábricas familiares en la UE de alto nivel, neutras en carbono y con energía 100% solar

Certificado PETA vegano

 Cuidado del calzado

Antes de estrenar tus nuevos zapatos HOSKA, te recomendamos utilizar un spray impermeabilizante, que asegurará que los zapatos estén protegidos de elementos como el agua, la suciedad o la sal. Al aplicar regularmente un spray impermeabilizante, la superficie del zapato se volverá impermeable, conservará su color y prolongará la vida útil del zapato. Después de aplicar el spray, dejar que los zapatos se sequen lo suficiente, no colocarlos cerca de fuentes de calor directas.

Limpieza del calzado

Limpie siempre la parte superior de tela de los zapatos a mano con un paño húmedo y un jabón suave o agua tibia con jabón. Nunca los lave a máquina ni los exponga a productos químicos agresivos como lejía o quitamanchas. Y no te olvides de las suelas: lo mejor es quitarles la suciedad con un cepillo. Si los zapatos están muy sucios, quítales la plantilla y remójalos en agua tibia y jabón (durante 30 minutos como máximo), luego escúrrelos suavemente con tu mano para permitir que el agua pase a través de las fibras y después enjuágalos con agua fría para quitar el jabón. Deja que los zapatos se sequen al aire, sin fuente de calor ni sol directo. También puedes limpiar las plantillas de la misma forma.